GUIA PARA TIEMPO DE ORACIÓN No 4 RELACIONES OCULTAS Y PROHIBIDAS

 ü  RELACIONES OCULTAS Y PROHIBIDAS

       2 corintios 4:1-2 (RV60)

 “Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos. Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios.”

2 Corintios 4:1-2 

 En esta oportunidad Pablo le está explicando a la iglesia en Corinto la bienaventuranza que tenemos los cristianos de ser ministros (servidores) del nuevo pacto que Dios ha hecho con la humanidad a través de Jesucristo. Y les recalca que esto es muestra de la Misericordia que Dios nos da. Y es precisamente por eso que debemos renunciar a lo oculto y vergonzoso, y no vivir engañando y usando la astucia para mal.

También les dice que la Palabra de Dios no debe ser adulterada, sino más bien, debemos permitir que ella nos invada con la verdad aún en la intimidad de nuestra conciencia.  Dentro de nuestro ayuno de inicio de año, hoy nos corresponde traer limpieza a nuestra vida en el área de las relaciones, y de manera específica revisar si hemos abierto nuestro corazón a relaciones ocultas y prohibidas. 

Este tipo de relaciones están dentro de lo que el apóstol Pablo llama “oculto y vergonzoso” y dice que debemos renunciar.  Relaciones amorosas con personas diferentes a nuestro cónyuge, relaciones de jóvenes que sus padres no aprueban, pero ellos las siguen a escondidas, relaciones sexuales fortuitas con conocidos o desconocidos, relaciones incluso que no se gestan personalmente pero que se tienen en la mente, usando la imaginación.

Esto es conocido como el adulterio del corazón y Jesús habló de él, como aparece registrado en el evangelio según san Mateo:

“Pero yo os digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón.”  S. Mateo 5:28

Debemos permitir al Espíritu Santo que nos escudriñe y redarguya, como lo dice el

Salmo 139:23-24: “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; Pruébame y conoce mis pensamientos; Y ve si hay en mí camino de perversidad, Y guíame en el camino eterno.

 

PREGUNTAS DE REFLEXION:

1. Estás teniendo alguna relación de este tipo y nadie sabe?

2. ¿Sabes que esto no agrada a Dios, lo quieres dejar de hacer, pero no puedes?

3. Tal vez no lo haces físicamente, pero si en tu mente? ¿Tienes adulterio del corazón?

4. Qué harás hoy frente a lo que Dios te está confrontando?

Toma tiempo para responder cada una de estas preguntas al Señor, y pídele de corazón al Espíritu Santo, que te convenza de pecado, y que la sangre de Cristo te limpie de toda maldad. Si lo haces de corazón, nuestro Padre Celestial te perdonará y hoy será el inicio de un nuevo tiempo en tu vida. El pecado quedará atrás y serás vencedor en Cristo Jesús. 

Si esta área esta en Luz en tu vida, y no hay pecado en ella, pídele al Señor Jesucristo que ayude a los que batallan con estas cosas.