Estimado Equipo,
A lo largo de nuestra trayectoria, continuamente hemos enfatizado la importancia de permanecer fieles a aquellos principios de la palabra de Dios que inspiraron la creación de nuestra organización. Son múltiples los esfuerzos, recursos y tiempo invertidos con el objeto de lograr que nuestro equipo comprenda la dimensión y trascendencia de la tarea a la que hemos sido llamados; que entienda la integralidad de nuestro enfoque transformador.
Es satisfactorio ver que dicha labor de siembra continua, ha arrojado buen fruto, manifiesto en cientos de personas que hoy tienen una forma diferente de percibir el mundo, de pensar, de sentir, de hablar, y por tanto de actuar, cosechando gracias a ello, bendición.
No obstante, sabemos que falta mucho por hacer; sabemos que podemos hacer mejores cosas, y hacer mejor las cosas. Si hemos de escuchar las anheladas palabras, 'bien hecho, mi buen siervo fiel, entra en la presencia del Señor', no podemos bajar la guardia; no podemos ignorar los tiempos, y mal haríamos en dejar de reiterar la importancia que tiene la practica diaria de aquellos principios sobre los que hemos fundamentado nuestro actuar, que no son otros, sino los principios de la Palabra de Dios, manual de vida, útil para toda actividad humana.
De ahí que, convencidos que la ruta hacia la transformación sostenible parte de lo individual hacia lo colectivo, al iniciar el 2014 les invito a declarar este, como el año en el que tendremos una Revolución del Corazón…pidiendo al Señor que continúe su obra en nuestra vida e invada por completo nuestro existir, para que así, seamos nosotros embajadores apasionados por la causa de Cristo, y entendiendo que El creo al ser humano, Espíritu, Alma y Cuerpo, para vivir en comunidad, avancemos impartiendo Su verdad en todo tiempo y en todo lugar… Persona por persona, familia por familia, comunidad por comunidad… Palabra y Hechos!
Missy Christie de Acosta
Presidenta.
